EL LEGENDARIO SONIDO DE MARSHALL LLEVA SEIS DÉCADAS CRECIENDO. DE ACORDE EN ACORDE, DE PERSONA EN PERSONA, DE GENERACIÓN EN GENERACIÓN.
¿PUEDE UN
SONIDO DURAR
60 AÑOS?
EL LEGENDARIO SONIDO DE MARSHALL LLEVA SEIS DÉCADAS CRECIENDO. DE ACORDE EN ACORDE, DE PERSONA EN PERSONA, DE GENERACIÓN EN GENERACIÓN.
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Y todo porque Jim Marshall se tomó el tiempo de escuchar a la gente joven que acudía a su tienda, con la que creó un nuevo sonido: el sonido de su generación. Un sonido que se hizo más grande y más fuerte. Un sonido que, con cada escucha, daba lugar a la siguiente. Hasta que se convirtió en algo más que un sonido, en algo más que un nombre. Se volvió una fuerza capaz de unir a las personas e impulsar el cambio.
Aún se puede oír, tan alto como siempre. En escenarios. En hogares. En las calles. Una fuerza inamovible que parte de una sencilla acción: escuchar. De modo que la cuestión no es si un sonido puede durar 60 años? La cuestión es:
¿QUÉ HARÁS CUANDO LO ESCUCHES?
Aún se puede oír, tan alto como siempre. En escenarios. En hogares. En las calles. Una fuerza inamovible que parte de una sencilla acción: escuchar. De modo que la cuestión no es si un sonido puede durar 60 años? La cuestión es: